miércoles, 27 de febrero de 2013

Patatas guisadas con apio

Estas son unas patatas guisadas con apio y base de tomate. El apio contiene gran cantidad de sodio natural que realza y equilibra el sabor suave y blando de las patatas.


Ingredientes:

4 cucharadas de aceite de oliva.
1 cebolla pequeña, pelada y picada fina.
6 tallos de apio, troceados (1cm. de grueso).
2 tazas de caldo vegetal.
½ taza de salsa de tomate natural.
1 hoja de laurel.
3 patatas rojas grandes (1kg.), peladas y cortadas a dados.
Sal y pimienta.
¼ de perejil picado fino.

Elaboración:

En una cazuela honda y ancha, calentar el aceite a fuego medio-alto y sofreír la cebolla hasta que quede blanda y transparente (5-7 minutos).
Bajar el fuego ligeramente y añadir los trozos de apio. Saltear durante 2 minutos, removiendo constantemente.
Incorporar el caldo vegetal, rascando el fondo con una cuchara de madera.
Añadir la salsa de tomate, la hoja de laurel y las patatas. Llevar a ebullición y reducir el fuego al mínimo. Tapar parcialmente y dejar hacer muy lentamente durante 20-25 minutos o hasta que las patatas estén hechas.
Salpimentar y desechar el laurel antes de servir. Espolvorear con perejil picado por encima.

Sugerencias para servir:

Este es uno de los platos de acompañamiento más deliciosos que hay para carnes a la parrilla o asadas. Combinan muy bien con el pollo al horno o relleno.

Variaciones:

Se puede sustituir el apio por dos bulbos de hinojo. Cortar el hinojo a rodajas de unos 2,5 cm. de grueso y guisar según se indica en la receta. El aroma dulce del hinojo combina a la perfección con la suavidad de las patatas. Añadir ¼ de taza de hinojo picado en los últimos 5 minutos de cocción. Otra variedad sería sustituir el apio por pencas de acelga troceadas.

martes, 26 de febrero de 2013

Crema sabayón


Deliciosa crema caliente, cuya preparación se hace con vino blanco y seco de buena marca (si se sustituye el vino por cava o champagne resultará mucho mejor). Para perfumarla, los licores más indicados son: ron, kummel y kirsch.

Ingredientes:

2 dl. de vino blanco seco. (Cava o Champagne)
5 yemas de huevo.
250g. de azúcar glas.
La corteza rallada de un limón.
1 cucharadita de vainilla en polvo.
Licor al gusto (ron o kirsch).

Elaboración:

Trabajar las yemas de huevo mezcladas con el azúcar, la corteza de limón rallada y la cucharadita de vainilla, hasta conseguir una crema lisa y homogénea. Incorporar poquito a poco el vino, poner el cazo sobre fuego suave y calentarlo, sin dejar de remover, hasta que este a punto de hervir. Llegado este momento, se retira del fuego, se añade el licor elegido para perfumarlo y se sigue batiendo unos minutos. Si no pudiera servirse en seguida, como es lo indicado, se cocerá al baño María y se dejará en el mismo, aunque retirado del fuego, hasta el momento de servirlo, ya que debe mantenerse caliente.

Presentación:

Se puede combinar en una copa o vaso hondo, con capas de crema alternando con dos capas de mermelada de frutos rojos, o con frutas troceadas como por ejemplo fresas, naranjas, frambuesas, etc. También se puede presentar en copa ancha de helado acompañada de barquillos o galletas ligeras. Sea como sea, siempre resultará deliciosa.

lunes, 25 de febrero de 2013

Buñuelos de puerro



Estos buñuelos resultan un aperitivo delicioso. Pueden acompañar a carnes o pescado a la plancha o asados o platos hechos con salsa de tomate.

Ingredientes:

1 kg. de puerros (la parte blanca y 5cm de la verde).
4 huevos grandes.
1 taza de puré de patatas.
½ taza de harina.
¼ taza de queso pecorino rallado (queso curado de oveja).
1 cucharadita de sal.
Pimienta negra.
Aceite.
Rodajas de limón para decorar.

Elaboración:

Cortar y lavar los puerros a rodajas finas, vigilando que no quede nada de tierra entre las capas.
Llevar agua con sal a ebullición. Escaldar los puerros durante 3 minutos. Escurrir y poner en un bol. También se pueden escaldar en el microondas con agua salada que los cubra y tapados, durante 2 ½ minutos. Escurrir y poner en un bol.
Combinar con los puerros todos los ingredientes restantes, excepto el aceite y las rodajas de limón.
Calentar 1 cc de aceite en una sartén. Hacer un pastelillo con la mezcla e ir poniendo en la sartén hasta tener tres o cuatro buñuelos al mismo tiempo. Dorar por los dos lados, dándoles la vuelta una sola vez.
Después de fritos, colocar los buñuelos sobre papel absorbente. Servir adornados con rodajas de limón.

Yema de huevo en la cosmética natural


Uno de elementos naturales con más aplicaciones en la cosmética natural es la yema de huevo, sus beneficios son muchos.
En nuestra despensa disponemos de elementos muy útiles y económicos para elaborar cosméticos muy efectivos y con la garantía de estar libres de aditivos químicos.
En este post os indico tres recetas naturales, una mascarilla facial, un champú y un acondicionador.

Mascarilla facial (pieles secas o sensibles):

1 yema de huevo.
1 cucharada sopera de aceite vegetal.
1 cucharada sopera de miel.

Antes de aplicar la máscara limpiar el rostro y aplicar un tónico neutro sin alcohol.
Mezclar estos ingredientes y aplicar la mascarilla sobre el rostro, pero evitando la zona ocular. La mayor parte de las mascarillas dan resultado si se dejan durante un período de tiempo (usualmente hasta 20 minutos).
Retirar la mascarilla con agua tibia, secar el rostro dando golpecitos y aplicar el tónico de nuevo.
Se aconseja aplicar la mascarilla una vez por semana ya que ayuda a mejorar la circulación y elimina las toxinas y la suciedad escondida.

Champú de huevo (cabellos secos):
 
2 yemas de huevo.
Agua tibia.

Mezclar las yemas de huevo batidas con un poco de agua tibia. El agua no debe estar demasiado caliente para evitar que las yemas cuajen. Aplicar esta mezcla a los cabellos, envolver la cabeza en una toalla y dejar varios minutos antes de aclarar completamente. No hay necesidad de aplicar ningún otro champú.

Champú de huevo 2ª receta:

1 huevo.
1 o 2 cucharadas soperas champú de hierbas.
1 cucharada sopera de gelatina.

Mezclar el huevo junto con el champú de hierbas y por último batirlo todo con la cucharada de gelatina. Aplicar como sustituto de tu champú habitual.

Acondicionador de cabello.

3 yemas de huevo.
Glicerina.
1 cucharadita de vinagre de manzana.
1 cucharada sopera aceite vegetal.

Batir las yemas de huevo y unas cuantas gotas de glicerina, el vinagre de manzana y el aceite vegetal.
Calentar suavemente la mezcla y aplicar a los cabellos ½ hora antes de utilizar el champú.










domingo, 24 de febrero de 2013

Pastas saladas rellenas de queso (Boyos)



Los boyos son pastas saladas rellenas de queso y hechas de masa fermentada. Se deja que la masa se hinche en aceite y luego se la espolvorea con harina y queso rallado. El resultado es una masa de textura hojaldrada que se parece un poco a la masa del strudel alemán, sólo que más gruesa y con más textura.
El boyo es un tipo de pasta elaborado por las comunidades safardíes europeas y en las cocinas sefardíes de Safed y Jerusalén, y se hacen para el brunch (comida entre el desayuno y la comida) del Sabat.

Ingredientes:

5 ½ a 6 tazas de harina.
3 cucharadas de queso parmesano o pecorino romano rallado.
½ cucharadita de sal gruesa.
1 cucharadita de azúcar.
2 ½ tazas de agua templada.
1 cucharada de levadura instantánea de panadero.
Aceite de oliva.
1 huevo extra grande batido con 1 cucharada de agua fría para pintar las pastas.
Semillas de sésamo para adornar (opcional)

Relleno: (mezclar todos los ingredientes hasta formar una pasta y usar de relleno)

½ kg. de queso blanco feta.
2 huevos batidos.
2 cucharadas de perejil fresco picado fino.
1 cucharada de hojas de menta fresca picada fina.
1 cucharada de hojas de eneldo fresco picado fino.
Sal y pimienta blanca.

Elaboración:

  1. Mezclar el queso rallado con ½ taza de harina. En un bol, poner 5 tazas de harina y sal y mezclar bien.
  2. Disolver el azúcar en agua templada. Echar la levadura y mezclar. Dejar a un lado en lugar seco (unos 10 minutos). Si la levadura funciona, burbujeará.
  3. Hacer un hoyo en el centro de la harina y echar en él la mezcla con la levadura. Remover bien y empezar a amasar. Si la masa necesitara más harina, añadirla a medida que se amasa. La masa tiene que estar algo más pegajosa que la masa de pan común ya que la falta añadir la harina con el queso. Cuando hayas acabado de amasar, pon la masa en un bol con aceite, cúbrela con un trapo húmedo y déjala reposar 30 minutos. La masa subirá un poco.
  4. Divide la masa parcialmente hinchada en cuatro partes iguales y haz una bola con cada una de ellas. Pon cada bola de masa en un bol que contenga un fondo de aceite de oliva y dales la vuelta de manera que queden embadurnadas por completo. Esto es importante para la textura de la masa. Cubre los recipientes con trapos húmedos o papel film y deja reposar otros 30 minutos. La masa volverá a subir.
  5. Mientras la masa reposa y sube, preparar el relleno de las pastas.
  6. Preparar dos bandejas de horno cubiertas con papel para horno.
  7. En una encimera impregnada de aceite, extender la bola de masa hasta hacer un cuadrado fino de unos 40cm por lado. Reservar un cuarto de la mezcla de harina y queso y de este cuadrado, espolvorear la mitad sobre la masa. Doblar los lados del cuadrado hacia adentro sobre el relleno, como cuando cierras una ventana (fig.1), haciendo que los bordes su unan.
  8. Echar por encima el resto de la mezcla de harina y queso que se ha reservado y doblar por la mitad la pieza (fig.2).
  9. Cortar la masa en seis cuadrados iguales (fig.3).
  10. De cada uno de los cuadrados, hacer uno más pequeño de unos 12cm de lado y poner una cucharada de relleno en el medio (fig.4).
  11. Doblar las puntas hacia el centro de la masa  (fig.5) y unir los bordes para cerrarlos. Para asegurarte, si quieres, puedes poner un poco de agua fría antes de apretar los bordes.
  12. Con la ayuda de una espátula, colocar la pieza sobre la bandeja. Repetir los pasos del 10 al 12 con las cinco piezas restantes de masa. Luego repetir los pasos del 7 al 12 con el resto de la masa y del relleno. Se obtendrán en tota 24 pastas.
  13. Calentar el horno a 200oc.
  14. Pintar las pastas con el huevo batido y si se quiere, adornarlas con las semillas de sésamo por encima. Hornear durante 20-25 minutos o hasta que las pastas se hayan dorado. Dejar enfriar a temperatura ambiente antes de servir.